La controvertida medida de Uber: una lucha para limitar las demandas en medio de acusaciones de agresión sexual
En medio de una tormenta legal que amenaza con inundar sus oficinas, Uber Technologies Inc. está impulsando una medida que podría cambiar drásticamente las reglas del juego en el estado de Nevada.
La compañía, famosa por revolucionar el transporte urbano, ahora busca reformar el sistema legal para protegerse de lo que consideran demandas frívolas y excesivas. Sin embargo, detrás de esta maniobra se encuentra una realidad mucho más oscura: la creciente ola de denuncias por agresiones sexuales contra sus conductores.
El Sueño de las Grandes Corporaciones: Limitar las Demandas
Durante décadas, las corporaciones en Estados Unidos han soñado con una solución para lo que consideran un exceso de litigios costosos y dañinos. Desde demandas por productos defectuosos hasta casos de agresión y acoso, las empresas han enfrentado un aluvión de acciones legales que, en muchos casos, han resultado en pagos multimillonarios. Uber, una de las compañías más grandes y visibles en el mundo del transporte, no es una excepción.
Ahora, Uber está liderando un esfuerzo en Nevada para limitar drásticamente las tarifas que los abogados pueden cobrar en casos de contingencia, un cambio que podría hacer que muchos abogados piensen dos veces antes de aceptar casos contra grandes corporaciones. Esta iniciativa, presentada bajo el nombre de Nevadans for Fair Recovery, propone que los abogados no puedan cobrar más del 20% de los acuerdos o compensaciones que obtengan para sus clientes.
La Controversia de las Tarifas de Contingencia
Las tarifas de contingencia son un aspecto crucial del sistema legal estadounidense. Permiten que las personas que no pueden pagar los honorarios legales por adelantado tengan acceso a la justicia, ya que los abogados asumen el costo del caso a cambio de una parte del acuerdo o la compensación final. En la actualidad, estas tarifas pueden llegar hasta el 40%, un porcentaje que Uber y otros críticos argumentan que es excesivo y perjudica tanto a los demandantes como al público en general.
Sin embargo, la propuesta de Uber establecería un límite del 20%, lo que la convertiría en la restricción más estricta del país. Solo un estado, Oklahoma, tiene un límite similar, aunque su techo es del 50%. Los expertos legales han advertido que una reducción tan drástica podría desincentivar a los abogados a tomar casos complejos y costosos, especialmente aquellos contra corporaciones con recursos casi ilimitados.
Una Jugada para Escapar del Escrutinio
El momento de la propuesta de Uber no es casualidad. La compañía está enfrentando una avalancha de demandas relacionadas con agresiones sexuales y acoso por parte de sus conductores. Estas demandas, que han sido consolidadas en un tribunal federal, han puesto a la empresa bajo un intenso escrutinio, especialmente en Nevada, donde cientos de pasajeros han acusado a Uber de no realizar controles de antecedentes adecuados a sus conductores.
En uno de los casos más recientes, una mujer identificada como K.K. en documentos judiciales, afirmó que fue violada por un conductor de Uber que la recogió en un hotel de lujo en Las Vegas. Según la demanda, el conductor la llevó a casa y luego regresó mientras ella dormía para agredirla sexualmente. Uber ha negado cualquier responsabilidad en el caso, afirmando que están comprometidos con la seguridad de sus pasajeros y que han intensificado los controles de antecedentes de sus conductores, lo que ha resultado en la eliminación de más de 80,000 conductores de su plataforma.
¿Protección o Escapatoria?
El impulso de Uber para limitar las tarifas de contingencia ha sido interpretado por muchos como un intento descarado de evitar la responsabilidad por las acciones de sus conductores. Herbert M. Kritzer, profesor emérito de derecho en la Universidad de Minnesota, quien ha estudiado extensamente las tarifas de contingencia, afirmó que la medida “básicamente cerraría las puertas del tribunal a los individuos que han sido perjudicados”.
De hecho, la estrategia de Uber parece alinearse con un esfuerzo más amplio de las grandes corporaciones para desprestigiar a los abogados de los demandantes, retratándolos como «cazadores de ambulancias» que se enriquecen a expensas de sus clientes y del sistema judicial. Este tipo de campañas, que comenzaron en la década de 1970 con el auge de las demandas colectivas contra las compañías farmacéuticas y los fabricantes de asbestos, han sido utilizadas por diversas industrias para reducir la cantidad de demandas en su contra.
La Batalla en Nevada
Para llevar su propuesta a los votantes, Uber necesitará recolectar 100,000 firmas de residentes de Nevada y superar un desafío legal que alega que la redacción de la iniciativa es engañosa. A pesar de estos obstáculos, la compañía confía en que obtendrá las firmas necesarias para fin de mes y espera que la propuesta sea sometida a votación en 2026, aunque algunos abogados sugieren que podría ocurrir tan pronto como el próximo año.
Mientras tanto, los opositores a la medida, incluido un grupo llamado Uber Sexual Assault Survivors for Legal Accountability, han presentado una demanda en un intento de bloquear la iniciativa, argumentando que engaña a los votantes al violar las leyes estatales. Aunque un juez estatal desestimó la demanda, el caso está siendo apelado.
El Impacto Potencial en las Víctimas
Si la medida de Uber se aprueba, las consecuencias para las víctimas de agresiones sexuales y otros delitos podrían ser devastadoras. Las tarifas de contingencia permiten que las personas que han sido perjudicadas, pero que no tienen los recursos para pagar un abogado, puedan buscar justicia. Reducir drásticamente estas tarifas podría significar que muchos abogados simplemente no puedan permitirse tomar casos que requieren tiempo y recursos significativos, especialmente cuando se enfrentan a grandes corporaciones con equipos legales bien financiados.
Además, esta medida podría sentar un precedente peligroso en otros estados, inspirando a más empresas a buscar formas de limitar su responsabilidad legal a través de la manipulación del sistema judicial. Esto podría resultar en un acceso aún más restringido a la justicia para las personas que más lo necesitan.
La Respuesta Pública
A pesar de las críticas, la campaña de Uber parece estar resonando con el público. Según encuestas realizadas por el comité de acción política que respalda la medida, aproximadamente el 86% de los encuestados en Nevada cree que el sistema actual sobrecompensa a los abogados y deja a las víctimas con muy poco dinero. Sin embargo, esta percepción podría estar influenciada por la narrativa promovida por Uber y otros grupos corporativos que han demonizado a los abogados de los demandantes como aprovechados y codiciosos.
El intento de Uber de limitar las tarifas de contingencia en Nevada es una táctica audaz que podría tener implicaciones de gran alcance, no solo para la compañía, sino también para el sistema judicial y las víctimas de delitos en todo el país. Si bien Uber presenta la medida como una forma de proteger a las víctimas de los abogados inescrupulosos, muchos ven en ella un esfuerzo cínico por parte de la compañía para evitar la responsabilidad por las agresiones sexuales cometidas por sus conductores.
Este es un tema que continuará desarrollándose, y que podría tener un impacto significativo en la forma en que se maneja la justicia civil en Estados Unidos. Los votantes de Nevada se enfrentan a una decisión crítica que podría definir el equilibrio entre el acceso a la justicia y la protección de las empresas en el futuro.
Fuente: The New York Times