16 de septiembre de 2024

Lyft en Crisis: Vende Parte de su Negocio de Bicicletas y Despide Empleados en un Intento Desesperado por Ser Rentable

Lyft, una de las principales plataformas de transporte compartido, está dando pasos drásticos para intentar cambiar su suerte y alcanzar la tan esquiva rentabilidad. En medio de la creciente presión financiera, la compañía ha anunciado que venderá una parte de su negocio de bicicletas y scooters eléctricos, mientras elimina el 1% de su plantilla.

Este movimiento forma parte de una estrategia más amplia para reducir costos operativos y alinear sus prioridades empresariales, pero también refleja la dificultad que enfrenta Lyft para competir con su principal rival, Uber.

El anuncio, realizado a través de un informe regulatorio, no ha revelado quién será el comprador de esta división de movilidad compartida, aunque la compañía ha estado en búsqueda de un socio estratégico que invierta en su infraestructura desde el verano pasado. Sin embargo, esta venta no es solo un ajuste de portafolio; representa un cambio profundo en la forma en que Lyft maneja su negocio, después de un año en el que su valor de mercado ha caído un 24%, con acciones que siguen bajo presión.

La presión financiera detrás de la venta

El plan de reestructuración también incluirá una carga financiera significativa para Lyft, que estima entre 34 y 46 millones de dólares en costos relacionados con la eliminación de activos, pagos por despidos y honorarios de asesoría. La mayoría de estos costos impactarán en el tercer trimestre de 2024, lo que subraya la urgencia de la compañía por actuar rápido. Aunque Lyft cuenta con cerca de 3,000 empleados, la reducción de personal es solo una parte menor del plan general. Aún así, el recorte del 1% de su plantilla refleja la necesidad de encontrar maneras de ahorrar donde sea posible.

Además de los despidos, Lyft espera que este plan de reestructuración mejore sus ganancias ajustadas anuales antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización (EBITDA) en unos 20 millones de dólares para finales de 2025. El camino hacia ese objetivo, según la compañía, implica no solo la reducción de personal, sino también una serie de eficiencias operativas y mejoras en la estrategia comercial.

El auge y los costos del bikesharing

El negocio de bicicletas y scooters compartidos ha sido uno de los puntos brillantes para Lyft en los últimos años, especialmente en ciudades como Nueva York, Chicago, San Francisco y Minneapolis. La popularidad del bikesharing ha aumentado significativamente, en parte debido a la pandemia de COVID-19, que llevó a muchas personas a buscar alternativas de transporte más seguras y al aire libre. En Nueva York, por ejemplo, las bicicletas eléctricas de Lyft se han convertido en una opción popular, ya que permiten a los residentes moverse por la ciudad rápidamente y sin tener que depender del transporte público.

Sin embargo, esta popularidad también tiene un precio. En un esfuerzo por mantener su operación, Lyft ha aumentado recientemente las tarifas de alquiler de bicicletas eléctricas en Nueva York, citando los altos costos de operación. A pesar de la demanda, el mantenimiento y la expansión de una flota de bicicletas y scooters eléctricos es un desafío logístico y financiero. Estas complicaciones han llevado a la empresa a reconsiderar la estructura de este segmento de negocio, buscando una inyección de capital externo.

¿Qué significa esto para el futuro de Lyft?

A principios de junio de 2024, Lyft presentó un ambicioso plan de crecimiento y rentabilidad a tres años. Este plan, que fue interpretado como un esfuerzo por tranquilizar a los inversores, tenía como objetivo revitalizar su negocio central de transporte compartido, que ha tenido dificultades para ganar participación de mercado frente a Uber. Lyft ha sido históricamente vista como la opción alternativa a Uber, pero la brecha entre las dos compañías ha crecido de manera significativa en los últimos años.

El enfoque de Lyft en los alquileres de bicicletas y scooters parecía ser una forma de diferenciarse en un mercado saturado, pero los problemas financieros han limitado la capacidad de la empresa para capitalizar completamente en este sector. En lugar de expandir agresivamente su negocio de movilidad compartida, Lyft ahora busca reducir costos y mejorar la eficiencia.

El reto principal sigue siendo la competencia feroz con Uber, que ha diversificado sus servicios más allá del transporte compartido hacia la entrega de alimentos, paquetería y servicios logísticos. Mientras tanto, Lyft se ha mantenido más centrada en el transporte compartido y la micromovilidad, lo que ha limitado su capacidad de generar múltiples flujos de ingresos.

Implicaciones para el mercado laboral

El despido del 1% de la plantilla de Lyft es solo una pequeña parte de una tendencia más amplia en la industria tecnológica, donde muchas empresas están reduciendo personal como parte de esfuerzos para reducir costos. Empresas como Meta, Google y Amazon también han anunciado despidos en el último año, lo que subraya un cambio en la mentalidad de Silicon Valley, que ha pasado de la expansión acelerada a la contención de costos.

Si bien Lyft no ha revelado cuántos empleados perderán sus trabajos específicamente en el área de bicicletas y scooters, es probable que esta división, que ha sido clave para el crecimiento de la empresa en ciudades importantes, vea una reducción considerable de personal y recursos. Los empleados afectados podrían incluir tanto a los equipos de operaciones de mantenimiento como a aquellos encargados de la expansión de la infraestructura.

El camino hacia adelante

Aunque la venta de una parte del negocio de bicicletas y scooters puede parecer una admisión de fracaso, Lyft lo presenta como una oportunidad para centrarse en su estrategia principal y recuperar el terreno perdido en el mercado del transporte compartido. La compañía espera que este cambio no solo reduzca los costos operativos, sino que también le permita enfocar sus recursos en mejorar la experiencia del usuario y ser más competitiva frente a Uber.

El tiempo dirá si este plan de reestructuración será suficiente para cambiar la fortuna de Lyft. Con las acciones de la empresa en declive y una competencia cada vez más fuerte en todos los frentes, la compañía enfrenta un camino cuesta arriba. Sin embargo, con un enfoque renovado en la eficiencia operativa y una posible inyección de capital proveniente de la venta de su división de bicicletas y scooters, Lyft tiene una oportunidad para redefinir su posición en el mercado y, quizás, encontrar finalmente el camino hacia la rentabilidad.

La reestructuración de Lyft refleja no solo los desafíos internos de la empresa, sino también la evolución del mercado de la movilidad compartida, que está viendo cambios significativos a medida que las ciudades intentan adaptarse a nuevas formas de transporte y los usuarios buscan opciones más sostenibles y eficientes. Mientras tanto, tanto inversores como usuarios estarán observando de cerca los próximos movimientos de Lyft.

Fuente: Bloomberg

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